¿Cómo afecta el cambio de hora en tu alimentación?

Adelantar una hora en nuestro reloj puede afectar directamente a tu dieta, llegando a provocar ciertos desajustes en ella. Descubre de la mano de nuestra experta en nutrición y dietética, Laura Subirà, cómo afecta el cambio de hora en tu alimentación y qué puedes hacer para no perder tus hábitos saludables.

A todos nos alegra dar la bienvenida al horario de verano. Con él se acercan nuestras ansiadas vacaciones, además de la llegada del buen tiempo, que nos permite disfrutar al aire libre de muchos planes con familia y amigos. Pero, como ocurre con todas las estaciones del año, existen cambios que no nos gustan tanto, y que afectan directamente a nuestro estado de ánimo y a nuestra salud. La falta de vitalidad o concentración es una de las causas más conocidas, aunque también son muchos los que se quejan de tener falta de apetito e, incluso, desorientación.

En el artículo de hoy vamos a explicarte cómo afecta el cambio de hora en tu alimentación. Aprovecharemos la ocasión para listarte algunos consejos para que tu régimen alimenticio no se vea directamente afectado y puedas afrontar este ajuste horario de la mejor forma.

Consejos para adaptarse al cambio horario

Por norma general, los efectos secundarios suelen desaparecer a los 3 o 5 días. Aunque, te recomendamos seguir estos pequeños trucos para que tu organismo se adapte rápidamente al nuevo horario de verano. ¡Anótalos!

1.- Modifica la hora de las comidas unos días antes

Fijar tu nuevo régimen alimenticio unos días antes al cambio puede ser el truco infalible para evitar una mayor sensibilidad tras el cambio horario. Es importante acostumbrar al cuerpo a los cambios, para que éste no se resienta y aparezca el temido cansancio o la fatiga que nos haga sentir mucho más irritables.

Desde el Centre Odontològic Els Quinze te recomendamos prestablecer un rutina horaria para realizar tus comidas. Evitar picar entre horas y, siempre que puedas, incluye una dieta rica en vegetales, proteínas y carbohidratos para tener un balance óptimo en tu alimentación.

Los primeros días puede que la adaptación al cambio de hora se te haga un poco cuesta arriba, aunque en menos de una semana tu vitalidad y energía mejorarán. Por suerte, los efectos del cambio de hora en nuestra alimentación son pasajeros.

¡Recuerda! Si tienes dudas, siempre puedes contactar con nuestra experta en nutrición y dietética en Barcelona, Laura Subirà. Ella te dará esos pequeños trucos y consejos que necesitas para no sufrir ni un desajuste en tu alimentación.

2.-  Establece una rutina de sueño fija

Tener una hora para ir a dormir y una hora para despertarse será crucial para que nuestro descanso sea óptimo y placentero. Te aseguramos que, si sigues un horario prefijado, tu organismo se recuperará y adaptará rápidamente al cambio de hora.

3.- Evita el exceso de bebidas energéticas o estimulantes

Específicamente después de las 15h, pero sobre todo, antes de acostarte. Bebidas como el café, el alcohol o las bebidas energéticas pueden alterar tu pauta del sueño. Por ello, es importantísimo evitar su consumo en las horas previas a conciliar el sueño.

4.- No hagas ejercicio a última hora del día

Si lo haces, estarás activando tu cuerpo antes de irte a dormir. Por ello, y aunque es fundamental acompañar nuestra dieta con una buena rutina de ejercicios, te recomendamos que realices deporte a primera hora de la mañana o de la tarde.

5.- ¡Disfruta de las ventajas del horario de verano!

A pesar de los desequilibrios ya comentados, el horario de verano nos ofrece otras ventajas. Por ejemplo, al adelantar una hora en nuestros relojes, aumentamos las horas de sol al día, y aportamos un mayor aporte de vitamina D a nuestro organismo. Además, disfrutamos de más planes al aire libre y tenemos más tiempo para practicar nuestros hobbies. Sin duda, un hecho que aumenta nuestra creatividad, productividad  y felicidad.