¿Cómo tener una boca limpia y sana? Guía de consejos prácticos

¿Cómo se puede tener una boca limpia y sana? No sólo depende de la higiene bucal diaria, sino de nuestra dieta alimentaria. Como dirían nuestros odontólogos… “Dime cuáles son tus hábitos nutricionales diarios y te diré de qué salud dental disfrutas”.

Muchos de los problemas que sufrimos en dientes y encías pueden solucionarse fácilmente siguiendo ciertos consejos de higiene y salud bucodental. Por ello, en el post de hoy vamos a enumerar cuáles son nuestros mejores trucos para mantener una boca sana y bonita. ¡Empecemos!

Salud bucodental: todo lo que debes saber

En Centre Odontològic els Quinze somos expertos en el cuidado de la salud oral. De hecho, nuestro personal experto en odontología ofrece los tratamientos y la formación necesaria para que nuestros pacientes gocen de una boca sana y limpia.

Para mantener una boca sana debemos cuidar dos universos diferentes pero paralelos: la alimentación/nutrición y la higiene oral. Está demostrado que una dieta basada en alimentos dulces y/o bebidas azucaradas produce una mayor desmineralización y desgaste del esmalte (incrementa la propensión a padecer caries ya que disminuye el pH natural de la boca, acidificándolo) que la dieta rica en verduras, hortalizas y pescado.

Asimismo, el consumo abusivo de café, té, vino tinto o cítricos también puede dañar/alterar el esmalte, se asocia con enfermedades periodontales, además de manchar los dientes a largo plazo. Con esto no queremos afirmar que debas eliminar este tipo de alimentos. No obstante, sí que te recomendamos tener en cuenta su consumo moderado e intentar lavar los dientes poco tiempo después de ingerirlos, para mantener así en perfecto estado dientes y encías.

Cuidados para la lengua

El cuidado de la lengua también constituye un elemento vital para el cuidado de la salud bucal. De hecho, nuestra lengua se convierte una de las fuentes de mal aliento al acumularse entre sus papilas microorganismos de todo tipo.

De ahí que sea muy importante cepillar la lengua cuando te laves los dientes. Incluso existen raspadores linguales especiales para su higiene. ¡Tú decides qué método utilizar!

Otros consejos sobre higiene oral

Otros consejos para la salud e higiene bucodental que te aconsejamos seguir al pie de la letra son los siguientes:

• Lavarse los dientes

Es vital que te cepilles los dientes de forma asidua para evitar la placa bacteriana. Como mínimo dos veces al día: por la mañana y por la noche; durante 2 minutos.

Asimismo, la recomendación para lavarse los dientes es mediante movimientos de arriba hacia abajo para los dientes de arriba y de abajo arriba en los inferiores. El cepillo debe ser de dureza media, de cerdas acrílicas, no muy grande y hay que recambiarlo cada 3 meses. No hay que mojar el cepillo antes del cepillado. Una vez usado, se limpia y se aconseja guardarlo cubierto con un estuche apropiado.

Si existe alguna dificultad motora (personas de edad muy avanzada, con enfermedades invalidantes, parálisis parciales, etc.) es muy recomendable usar un cepillo eléctrico.

Si sufres de sensibilidad dental, debes visitar a tu dentista para conocer la causa de esa sensibilidad y tratarla.

• Utilizar la pasta de dientes y enjuagues bucales idóneos

El tipo de pasta dentífrica y enjuague bucal que utilices en tu higiene dental también importa. Si tienes un riesgo de moderado a elevado de caries, recuerda comprar dentífricos que contengan flúor a dosis elevadas para prevenir la caries. Aplica el dentífrico sobre el cepillo seco. Aproximadamente del tamaño de un guisante. Cuando acabes el cepillado, escupe el exceso de dentífrico y no te enjuagues. De esta manera permites que el flúor penetre en el esmalte, endureciéndolo y protegiéndolo del ataque ácido de las bacterias causantes de la caries.

De todas formas, debes visitar regularmente tu odontólogo(a): él(ella) sabrá qué pasta es la más indicada en el momento de la puesta a punto de tu boca.

• No te olvides del hilo dental

Tras el cepillado de los dientes, utiliza el hilo dental para eliminar cualquier resto de comida que haya podido quedado en los espacios interdentales. Utilízalo, al menos, una vez al día; preferentemente por la noche, cuando tu periodo de ayuno será más largo y decrece la estimulación salivar y sus efectos protectores.

Si no sabes cómo hacerlo, aquí te recordamos algunos consejos fáciles:

1. Sigue un orden y haz movimientos suaves hacia arriba y hacia abajo.
2. Pasa el hilo dental entre cada espacio interdental, desde las muelas a los incisivos centrales.
3. Ten cuidado en no dañarte las encías. Si eso sucediera, puedes comprar hilo o seda dental con cera, o cinta dental para que se deslice con más delicadeza.

¡No esperes a que te duela!

Prográmate las visitas con tu dentista de confianza y no esperes a tener dolor para pedir cita. Para tener una boca limpia y sana es fundamental programar revisiones periódicas con profesionales de la odontología. Recuerda: ¡Siempre es mejor prevenir que curar!