¿Qué es la saliva y cuál es su función en la salud dental?

¿Qué es la saliva y cuál es su función en la salud dental?

La saliva es un líquido transparente formado por agua en un 99% y en un 1% por otros componentes orgánicos e inorgánicos. Entre las propiedades de la saliva está el favorecer la digestión y proteger los dientes. Sigue leyendo este artículo para ver qué es la saliva y cuál es su función.

Funciones de la saliva y cómo afecta a la cavidad bucal

 

Los romanos llamaban a la saliva “et aqua vitae ab ore” o, lo que es lo mismo, el agua de la vida de la boca.

Las glándulas salivales segregan saliva para proteger mecánica y químicamente a la cavidad bucal de muchas infecciones. Además, la saliva ayuda a elaborar el bolo digestivo, permitiendo que los alimentos pasen de la boca al estómago sin dañar el esófago, creando esta segregación viscosa que ayuda a empezar a digerir los alimentos.

Además, las proteínas de la saliva crean una película alrededor del esmalte dental, dificultando que los agentes externos que entran en la boca puedan dañar tus dientes.

Así, ante la pregunta “para qué sirve la saliva o cuál es su función”, diremos simplemente que sirve, por un lado, para proteger la boca y el tracto digestivo, y por otro, para detener enfermedades que pueden afectar la zona periodontal o incluso áreas anatómicas más profundas. Asimismo, la cantidad y la calidad de saliva puede estar relacionada con múltiples patologías.

¡Vamos a verlo!

Tipos de saliva y su función en la salud dental

Principales enfermedades que podemos detectar por medio de la saliva

 

Como en la mayoría de las situaciones, la salud se encuentra en el punto medio entre una determinada enfermedad y la secreción de saliva. La cantidad de saliva que segrega una persona a diario es entre 1 litro o litro y medio. Todo lo que esté por encima o por debajo de estos niveles de secreción salival puede ser patológico. Pero no te preocupes, ¡no tienes que ponerte a medirlo!

Los excesos lo son precisamente porque se notan a simple vista, así que veamos qué pasa en cada uno de ellos.

 

Falta de secreción salival o boca seca

 

Tener mucha la boca muy seca, dificultad al tragar o al deglutir puede ser un síntoma de lo que llamamos xerostomía. Es decir, sensación de boca seca. Si además se acompaña de disminución real de la secreción salival, hablamos de hiposialia.

Es un problema que puede venir derivado de estar viviendo un pico de ansiedad o estrés, de tener una mala alimentación (hipovitaminosis) o por el abuso del tabaco y del alcohol; pero sobre todo es una consecuencia frecuente derivada del tratamiento con algunos medicamentos, como los antidepresivos, los antihistamínicos, los reguladores del estado de ánimo, la medicación contra el párkinson, la quimioterapia antineoplásica, la medicación para la hipertensión, etc.

La xerostomía es un problema que puede tener consecuencias más allá de la cavidad bucal o de la zona periodontal (inflamación de las encías, aumento de caries…). En concreto en el esófago.

¿Recuerdas que dijimos que la saliva ayuda a crear el bolo alimentario? Bien, si el bolo es muy sólido, los alimentos podrían dañar el esófago. El cuerpo es una máquina perfecta en la que todo está relacionado por lo que, independientemente de la saliva, mantener una correcta higiene bucal y masticar bien los alimentos también ayudará a evitar este tipo de problemas.

Además, masticar más lento implica poner consciencia en el momento de la comida, lo cual implica trabajar la propia relajación y, por lo tanto, reducir ese pico de estrés que podría provocar una menor segregación de saliva.

En Centre Odontològic Els 15 trabajamos con una filosofía conservadora, basada en preservar los dientes tanto como sea posible. Pero también desde una vertiente médica: tratamos al paciente como un todo, en el que cada parte se relaciona con las demás. Sabemos que tras una mala salud oral puede subyacer una patología general. Y viceversa.

Por eso, al menor problema bucal, te recomendamos que visites a tu dentista, porque es posible que esté relacionado con algún problema de salud general. El cuerpo habla y parte del trabajo de los dentistas es interpretar las señales que se manifiestan en la cavidad bucal y en nuestros dientes.

Problemas derivados de un exceso de saliva

 

La hipersalivación o sialorrea suele ser un síntoma derivado de un problema neuronal y de enfermedades degenerativas, como el Parkinson, el autismo, el síndrome de Down, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) o algunos tipos de accidentes vasculares cerebrales.

Cuando este síntoma se convierte en algo permanente, se pueden tratar las glándulas salivares, para impedir que sigan segregando tanta saliva.

Obviamente estamos hablando de casos extremos y, como siempre, si te sientes mal o tienes el mínimo síntoma, lo mejor es que te pases por el dentista.

Conclusión: Cómo tener un buen cuidado de la saliva y la cavidad bucal

 

Por último, te recomendamos que, para tener una salud bucodental óptima especialmente en relación con la saliva, bebas mucho líquido y extremes la higiene dental nocturna.

¿Sabes por qué? Porque los niveles de saliva disminuyen por la noche, como si las glándulas también durmieran.

Por eso, para mantener la boca cuidada y protegida, lo mejor es que te vayas a dormir con los dientes realmente limpios, realizando limpieza con cepillo e hilo dental. También puedes usar algún tipo de enjuague bucal si lo consideras oportuno.

En cualquier caso, no olvides que tienes que realizarte una higiene dental profesional al menos una vez al año, y revisar tu salud bucodental también de forma anual. ¡Te esperamos en Centre Odontològic els 15, tu dentista en Maragall, Barcelona!